“ESOS NO PUEDEN SER VENEZOLANOS”

Soldado dispara contra David Vallenilla

No puedo borrarme de mi mente la imagen del soldado disparando desde la grama interna, del sector de cerca perimetral de la Base Aérea Francisco de Miranda en La Carlota, a un ciudadano, un joven desarmado quien pensó que su back pack terciado como peto podría detener la bala, y de quien me entero sería primo segundo de Winston Vallenilla, a quien no le duele su muerte porque, en su consciencia vendida al mejor postor, su primo estaría protestando contra el régimen que él apoya "rodilla en tierra",  y que “bien hecho”, su muerte está más que justificada.

Yo he aterrizado muchas veces en esa base, en mis tiempos de aviador aeronaval activo; porque, esa base es asiento del Escuadrón Aeronaval de Transporte Ejecutivo de la Aviación Naval, a la cual pertenecí desde 1976 a 1989, y porque además estuve 7 meses de comisión de servicio en el Grupo 5 de la FAV en 1980, donde volé unas 300 horas en dicho lapso. De tal manera que, a mi mente no le fue difícil figurarse ese instante. Las fotos en las redes nos demuestran que el soldado estaba muy protegido por una cerca, además de que con dar unos pocos pasos hacia atrás se podría haber protegido de unas piedras lanzadas por esos jóvenes. Pero, su terror era cerval y no le dejaba pensar, sólo le permitía "cumplir la orden" de repeler al enemigo traidor y lacayo del imperialismo, que no permite que su jefe nos meta un gato por liebre de una constituyente inconstitucional.

La presencia eufórica y enardecida de los jóvenes no era realidad una amenaza tan grave que le debería haber generado tanto temor a perder la vida; en cambio, él, desde su posición privilegiada, en la cual no tenía necesidad de disparar para defender la suya, sí lo era y los valientes jóvenes la desestimaron y se inmolaron en el altar de la patria que defienden. El, con alevosía y sevicia, a quemarropa y con evidente odio contenido, disparó a mansalva contra unos carajitos “hijos de papá y mamá pelucones”, quienes vienen a atentar contra el gobierno que nos sume en miseria, hambre y carencia de medicinas y de todos los insumos para la vida diaria.

Realmente me sentí indignado, muy dolido y asqueado de este régimen y de hombres como esos, a quienes desconozco y con toda seguridad no comparto ni siquiera ciudadanía. “!Esos no pueden ser venezolanos!”, es la frase más común hoy día, se la dice a sí mismo el ciudadano común, como para excusar la barbarie que observa cometen esos desalmados, como para demostrarse a sí mismo que no puede ser. “Vale, yo no creo”, es la excusa y disculpa a ultranza. Los funcionarios o lo que parecen serlo porque usan los uniformes modelo “patriota” cubanos, que utilizan ahora indistintamente la fuerza a la que pertenecen, todos los miembros de las FANB, están haciendo uso de armas de guerra, sin ver consecuencias y con absoluta falta de pudor, al no percatarse de que ya nada es secreto en esta aldea global y que esa imagen ha sido captada por un celular inteligente, y ya está rodando por el mundo.

Quizás se basan en la tesis de “¿Y qué” de la doctrina de Aristóbulo, o la aún más novedosa y del más avanzado Derecho Internacional Público, a lo Delcy Solórzano, quien hace como la mujer cornuda que “vende el sofá” o la del “avestruz”, al decir que no le importan las decisiones de la OEA; porque, “Venezuela ya  no está en la OEA”. Olvida la ignorante supina que existe el Estatuto de Roma, y que es tan culpable el que da la orden como el que la cumple y que los crímenes contra los DDHH no prescriben, así mismo es culpable por igual el funcionario que permite esas violaciones de parte de personal bajo su mando, así nos declare que:  “"No quiero ver un Guardia Nacional más cometiendo una atrocidad en la calle". “Llamarse jefe para no serlo es el colmo de la miseria”, dijo Simón Bolívar.

La frase de mi titulo la expresa indignada mi esposa al ver junto conmigo la imagen, como la expresa la población nacional entera. No obstante, me atrevo a repreguntarme:

¿Qué pasa si efectivamente son venezolanos? ¿ Es que el flagelo cancerígeno y sidoso de esa ideología perniciosa destruye las fibras más profundas de nuestra otrora decente y noble nacionalidad e idiosincrasia?

¿Es que estamos tan alienados y penetrados por ese flagelo castro comunista que ya no sentimos sino odio contra el disidente? ¿Qué pasó con el Pluralismo constitucional?

¿Es que un disidente con piedras y molotov asusta tanto a unos funcionarios vestidos como Robocop y equipados con la tecnología más avanzada de represión, que ya  actúan aterrados?

Es que acaso olvidan que no se deben utilizar armas de fuego para contener una protesta, por más revoltosa que ésta sea?

Creo que esta muerte deja al Rey desnudo y revela las muy profundas falencias de nuestras FAN y de los órganos de seguridad ciudadana y no sè què decir del venezolano común de hoy. Veo con preocupación cómo el rumbo de colisión nos lleva contra el iceberg de una guerra civil declarada y total. Cuando menos, como me decía un abogado amigo anoche, que en el evento de que se diera la constituyente inconstitucional se produciría un enfrentamiento campal de pueblo contra pueblo, y el sector disidente pudiera invadir los centros de votación para acabar con este proceso ilegal, inconstitucional e ilegitimo, al cual lo llevan “nariceado” utilizando decisiones atrabiliarias y la connivencia y el cohecho del poder ejecutivo encompinchado con unos poderes obsecuentes, cooptados y tan corruptos como él. Ojalá y no se confirme esta profecía.