ITALO
Tu vida fue una nave que zarpó una tibia madrugada de marzo, desnuda tu
alma y con rumbo franco al norte de la rada taciturna del Golfo Triste, que hoy
te llora, en apacible tarde de acuarelas de la plaza de tus amores.
La fugaz brisa de una mirada enamorada te cambió tu
rumbo y perdido anidaste en puerto libre tus andanzas de bohemio a la deriva. Tu
nave encalló para siempre en las arenas del golfo, y allí te uniste en abrazo
eterno con la mar de tus ensueños, para quedar sembrado, sin remos ni timón.
Ya no hubo más angustias de marinero atormentado
por el rolido, el cabeceo y la guiñada de tu traviesa nave, en la turbulencia
de tus aguas inquietas; pues allí, de pronto, surgió tu Capitana…Nelly,
abriendo vitrales de luz para tu angustia y te ofreció el amante reposo de su
cálido regazo. Desde ese instante, tu alma fue barca que surcaba el mar,
serena, siguiendo las gaviotas del pensamiento.
Allí tus bodegas plenas de cariño se abrieron para
ser descargadas en almacén seguro, donde unos brazos en dogal estibaron tus
afectos primeros para siempre y donde, rendido,
entregaste tu carga de amores a la dueña de tu cautivo corazón.
Pronto encontrarías motivos para soñar, en Una
Rosa Pintada de Azul del Valle de San Esteban, en la rendida estrellita
enamorada en una tarde en Playa Blanca, sujeta en los brazos amantes de una
princesa celestial. Escribiste un poema
muy fácil, enredado en el motivo de un mundo nuevo lleno de amor y de fantasía, y nos enseñaste, con las hijas
de tu ingenio, a amar y vivir en ese mundo de canciones que tu genio nos legó. “Motivos
“, “Poco a Poco”, “Olvídate que me olvidas”, “Te lo voy a decir
cantando”, “Tu eres bonita” son
algunas y entre ellas, “Mi Puerto Cabello”, el cual por la magia del pueblo fue
asumido como el himno de su
alegría.
Unos Ojos Bañados de Luz fueron fanales que arrastraron tu barca, y allí,
absorto en la sonrisa temblorosa de Unos Labios Queriendo Besar, te
quedaste unido al MOTIVO de tu vida.
Volví a soñar dijiste un día, y volví a soñar contigo respondieron esos labios llenos de motivos. Volviste a mí como siempre en mis sueños.
Con
la misma mirada, embrujaste mi tranquilidad.
En ese romance se fueron muchos años y de él
nacieron frutos maravillosos que honrarán tu nombre. En la Sinfonía armoniosa de una
casa frente A Tu Playa, hoy nos dejas…y me despido de ti con el recuerdo de
la magistral frase que sabiamente nos enseñaras y que me arriesgo a
parafrasear… aquella de que de ahora en adelante…quedaremos… yo
sin ti; pero, tú siempre en mí.
Amigo, como nos pediste y fuera nuestra promesa… Le
hemos dicho a la brisa que lleve hasta ti, sus canciones de mar.
! Hasta luego…amigo…!
Eddy Barrios, 12 de Marzo de 2011
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