SOLUCION
DE FUERZA VERSUS ELECCIONES REGIONALES
La planificación de la
Seguridad y Defensa (que no es sólo militar, sino en los 4 campos del poder) contempla,
luego de estudiada la situación y las capacidades y poder del enemigo, la formulación
de formas de acción para solucionar o acometer el problema operacional (también
utilizada para lo administrativo) que se nos pone delante, como escenario
posible o probable, en el futuro de incertidumbre en el cual normalmente se
producen los fenómenos de la Polemologia. Resolver esa incertidumbre asociada a
la toma de decisiones para poder aplicar los escasos recursos de los cuales
contamos (siempre son escasos) ante las necesidades, abundantes y competitivas
entre sí, que conforman esa realidad agonal, es materia de la ciencia de la
Toma de Decisiones, dentro de la Estrategia, al más alto nivel. Esto es, la
esencia de la Metodología de Planificación de Comando y Estado Mayor, en la cual,
tanto mi admirado y envidiado amigo como mi humilde persona, somos expertos,
como en algunas áreas de conocimientos civiles, en cursos dentro y fuera del país.
En ese escenario asumimos hipótesis,
suposiciones, estudiamos el poder relativo de combate y diseñamos esas formas
de acción las cuales vamos a hace pasar por un cedazo que tiene tres niveles o
pasos. Primero ver si las formas diseñadas son ADECUADAS; es decir, si al aplicarlas resuelven el
problema. Luego, ver si contamos con los recursos para aplicarlas; o sea, si
son EJECUTABLES o PRACTICABLES y, por último, como todo lo que ocurre en la
naturaleza y en la vida en general está asociada y comporta siempre un riesgo, analizar
esas probabilidades o, en esencia, ver cómo resolvemos esa pregunta o incógnita
irresoluble por mera observación, como es la condición natural del azar propio de la naturaleza aleatoria de la
existencia, asociada a incertidumbre, ya que nada en la vida es determinístico.
Por tanto, tenemos que asumir esos riesgos y calcular esos daños, propios y del
enemigo y concluir si son ACEPTABLES; o lo que es lo mismo, si podemos asumir ese
costo, o el costo del beneficio de alcanzar el triunfo.
Se dice que los grandes
generales de la historia han tenido siempre un número en sus mentes, un número
aceptable de pérdidas humanas para cada
accionar de su campaña. Por ejemplo, existe toda una teoría científica de análisis
de riesgos y es aplicada en varias disciplinas, como la estadística, los análisis
actuariales y por supuesto en la guerra y en la política; recordando que Claus
Von Clautsewitz nos enseñó que “La guerra es la continuación de la política
por otros medios”.
Vamos a tener pérdidas
cualquiera sea la decisión. Tampoco podemos concentramos solamente en una sola
forma de acción, pudiéndose combinar las mismas, como es las elecciones
regionales combinada de manera concurrente y complementaria con la resistencia pacífica
o como venga, en las calles, en el parlamento, en la vida y ámbito de cada
ciudadano.
No es que solamente pensemos
en que no debamos dejar espacios vacíos, sino que debemos ganar en todos los
escenarios, porque la lucha está planteada en todos los ángulos. Se nos juntó,
como decía mi madre, “el hambre con las ganas de comer”, y las elecciones regionales
– las cuales son a término cumplido – se atrasaron gracias a las maniobras
dilatorias del régimen, y llegaron junto con su decisión de convocar ilegítima
e inconstitucionalmente una ANC. Además de que la respuesta número tres a la
pregunta de la Consulta Popular del 16 de julio 2017, relativa las elecciones
fue contestada por el pueblo (7,6 millones) como SI. De tal manera que el régimen
apeló a las elecciones, pero, sólo de gobernadores y no lanza las parlamentarias
regionales, porque cuenta con una baraja escondida, la posibilidad de disolver
esos gobernadores, como es su costumbre, contando con que actualmente tiene 14
Asambleas legislativas presididas por el PSUV y así puede dejar de gobernador
al presidente de la Asamblea legislativa del correspondiente estado donde pierda.
En tal sentido, encuentro comprensible
aunque no estoy seguro si válida, o al menos la mejor decisión, abstenerse de
las regionales. Incluso deploro que MCM nos llame traidores. Respeto la opinión
formulada por mi colega y amigo, el ilustre CN Bernardo Jurado Capecci, a quien
genuinamente admiro por su clara inteligencia, en cuanto a que, según sus análisis,
la solución para el conflicto actual de Venezuela pasa solamente por el empleo de la fuerza, o de un conflicto
armado tipo revuelta popular e incluso el levantamiento militar, en cualquiera
de sus modalidades e intensidades. Miren que él es un profesional muy bien
formado y es un hombre muy culto y preparado y no trato de contrariar su opinión,
sino de expresar las mías, las cuales van en la vía de la segunda opción, la
electoral regional.
BJ no le ve ninguna probabilidad a la solución democrática,
pacífica y electoral, como ha sido el cacareo de la oposición desde hace ya varios
meses, una vez que ganamos las elecciones de diciembre 2015, la cual nos dio la
mayoría calificada en la AN y HRA lo prometiera. Creo que una solución violenta
siempre ha estado en el tapete. La función de quienes son políticos de verdad,
o estadistas, es buscarle solución desde otra perspectiva no violenta.
La intervención norteamericana
(aunque en caso de darse tal opción no descartable, debería ser la estricta aplicación
de los tratados del Sistema interamericano, como es la Carta Democrática de la
OEA) o mundial, la que nos sustrae a una
solución multilateral, con resolución previa del Consejo de seguridad, o
incluso una llamada Injerencia Humanitaria, o la aplicación de lo establecido
en el estatuto de Roma, ninguna de ellas es deseada por mi persona, aunque están
en la esfera de la Real Politik y o la de los tratados.
No sé tampoco si pudiera darse una “Extracción Quirúrgica” del cáncer castro
comunista y sus aliados internos, o una contención del SIDA que nos atacó por invitación
de los obsecuentes y alienados líderes revolucionarios, quienes así
traicionaron los intereses de nuestra nación invitando a Cuba escudándose en el
antiimperialismo selectivo de los yanquis. El caso es que las probabilidades de
alguno de estos escenarios ocurra vienen incrementándose a paso de vencedores.
Es en este escenario donde decidí proponer mi nombre para las parlamentarias
regionales.
Dar un paso al frente cuando se trata de arriesgar la vida no es algo fácil. Más de cien días de enérgicas manifestaciones hicieron que el régimen cediera en cuanto a las elecciones de gobernadores pero a un precio muy caro. La oposición al régimen está ganada en más de un 80% y eso hace segura la opción electoral. En la India de Ghandi, murió mucho más gente que aquí y el imperio inglés no logró que empuñarán un arma. Determinación de un líder.
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