domingo, 5 de julio de 2015

NUEVA RESPUESTA DEL CN EDDY DARÌO BARRIOS OROZCO
AL COMUNICADO OFICIAL DE CANCILLERÍA GUYANESA:
(04 DE JULIO DE 2015)

Como venezolano preocupado, sin mayor basamento ni competencia o autoridad, más que el dictado de mi corazón y de mi consciencia, como del  amor a la tierra de mis padres y ancestros, así como del legado que siento debo dejar a mis hijos y nietos, el 8 de junio de 2015 escribí una carta abierta dirigida al canciller de Guyana, el honorable Odeen Ishmael, como respuesta al comunicado oficial de cancillería guyanesa publicado en dicha fecha. Hoy debo efectuar la debida réplica el nuevo comunicado, esta vez extensísimo, basado en premisas falsas, con  las cuales el distinguido canciller enrostra a Venezuela de acciones que jamás han estado en el pensamiento ni en el accionar de nuestros líderes y que, ciertamente, no se corresponden con la verdad histórica del conflicto. 

Con esta larga argumentación se intenta sustentar la pretensión de Guyana de propiedad sobre nuestro Territorio Esequibo, Guayana Venezolana, o simplemente Esequibo, ubicado al oeste del Río Esequibo, territorio que es parte integral de la Capitanía General de Venezuela promulgada por la corona a española el 8 de septiembre de 1777, y debemos recorrdar que ocn le Tratado de Tordesillas todo cuanto etsba al oeste el meridiano a 370 millas al oeste de cabo Verde era propiedad de España. Venezuela se apega al principio jurídico internacional del Utis Posidetis Iuris, ignorado por Inglaterra, por los árbitros y por  la hoy Guyana o República Cooperativa de Guyana. Inglaterra y los árbitros aplicaron el Utis Posidetis de facto, y la hoy Guyana se cobija en él. 

El territorio de la hoy Guyana, al este del rió señalado, fue previamente de Holanda, país que nunca tuvo propiedad de territorio alguno al oeste del río Esequibo. El tratado de Munster  entre España y los Países Bajos deja clara la propiedad de Holanda de este territorio, ubicado al este del río Esequibo y deja muy claro que dicha nación no  tenía nada al oeste del señalado río, el cual es el límite natural entre los dos países, Venezuela y la hoy Guyana. O sea, nunca nuestro territorio Esequibo fue ni de Holanda, ni de Inglaterra. No obstante los colonos del Demerara se pasaron al oeste, invadiendo terreno y se establecieron allí. Cosa que fue reclamada por nuestro Libertador Simón Bolívar desde 1822.

Al este territorio, ubicado al este del rio Esequibo, pasar a ser la Guayana Inglesa, comenzó la maniobra imperial de despojar a Venezuela de estas tierras al oeste del rio limite entre las dos naciones, con el fin ulterior o interés geopolítico de tomar control de las bocas del río Orinoco, como se lo recomendara a la corona inglesa, en sendas cartas, el naturalista prusiano Robert Shombourg, como el mismo General O`Leary, edecán del libertador, quien, como sabemos, era inglés.
 

La posición esgrimida por el Canciller Odeen Ishamael, quien así hoy declara, desconoce el Acuerdo de Ginebra donde su primer, Primer Ministro para 1966, Forges Burham, firmó vvoluntariamente , sin coaccion ni apremio, como lo firmó el representante de Inglaterra, y donde las partes firmantes reconocìan la contención unilateral de Venezuela de que el Laudo de París de 1899 había sido y es Nulo e Irrito.


Toda la argumentación del canciller y que amerita de un análisis más a fondo, se sustenta precisamente en que ese laudo amañado de Paris, de 1899 sigue vigente, cuando lo único vigente es la búsqueda de un arreglo práctico para una solución satisfactoria para ambas partes. Vale decir, Guyana heredó de Inglaterra la tenencia de un territorio que nunca fue de Inglaterra, como no lo fuera de Holanda y mucho menos de la hoy Guyana. La posesión u ocupación temporal, en la cual Guyana ejerce administración, está sujeta al resultado de la solución a la que el Acuerdo de Ginebra obliga a las partes, a ser obtenida, como reza el acuerdo, mediante el empleo de los métodos de solución pacífica de conflictos del artículo 33º de la Carta de las Naciones Unidas.


Venezuela nunca ha sido inamistosa con Guyana y, al Venezuela reconocer su abrupta como extemporánea independencia en 1966, otorgada por Inglaterra a su colonia para salvarse de tener que negociar con semi bárbaros como consideraba a Venezuela, la que le reclamaba el despojo, hizo reserva expresa de que el reconocimiento no significaba renuncia a sus legales y legítimos derechos sobre el territorio Esequibo, el cual fue un territorio despojado por Inglaterra y cedido a la nueva nación independizada, como quien comete un crimen y entrega en depósito los bienes obtenidos del mismo a un agente de retención, el cual se constituye en cómplice, en este caso no inocente. O sea, un acto tan ilegítimo e ilegal como lo fue el laudo que sentenció, previas irregularidades cometidas por los árbitros en el mismo, que ese territorio era de Inglaterra.


De tal manera que mi respuesta inmediata es preliminar y el concepto de “Territorio soberano de Guyana” esgrimido por el canciller Odeen Ishmael, es a la vez, total e históricamente, inexacto como inaceptable.


Ese territorio fue despojado a Venezuela en un acto de imperio o un acto “de facto”, por vía de la fuerza de una sentencia irrita y nula. Venezuela conoce de las irregularidades cometidas en el proceso de negociaciones secretas de la mesa donde Venezuela estuvo representada por dos árbitros norteamericanos (Brewer y Fuller)  quienes se pusieron de acuerdo con los dos británicos (Collins y Russel) y con el presidente del tribunal, de origen ruso, Martens) gracias a que el abogado (Severo Mallet Prevost) de los negociadores norteamericanos  quienes representaban a Venezuela, nos legó su manifiesto, en carta póstuma,  en ejercicio de un arrepentimiento  tardío en previsión del juicio de la historia, donde nos explicó como había sido ese proceso, además de la falta de motivación de la sentencia y vicios de extra petita que la misma adolece. A Venezuela no le fue permitido ser representada por abogados venezolanos. 

Creo haber argumentado sólidamente que las pretensiones de Guyana no son ciertas, son un avieso sofisma, y jamás pueden ser honradas, y que Venezuela hará cuanto deba hacer para defender su soberanía e integridad territorial, con todos los derechos que le asisten. 



En lo particular, ya que no represento al estado sino a mi familia, hice un juramento de defender la patria lo cumpliré, aún a riesgo de mi vida, para dejarles a mis hijos y nietos una patria libre y soberana.

2 comentarios:

  1. Corrección obligada: El Sr Odeen Ishmael no es Canciller, fue embajador de Guyana en Venezuela. Gracias al amigo Domingo Domingo González, quien me hizo la correccion.

    ResponderEliminar
  2. Presidente : David Arthur Granger
    Primer ministro : Moses Nagamootoo
    Canciller : Carl B. Greendige

    ResponderEliminar